Nafarroako Gobernuko haur eskoletan ratioak igotzeari eta masifikazioari EZAdministrazioa 2023/02/27Zazpi haur eskolak Hezkuntza Departamentura igaro zirenean, ratioak handitu egin ziren eta horrek zerbitzuaren kalitatea nabarmen murrizteko arriskua ekarri zuen; orain Nafarroako Gobernuak beste koska bat estutuko du, eta datorren ikasturtetik aurrera indarrean dagoen araudiak ezartzen dituen gehieneko ratioak ezarriko ditu: 8-12-16. Argi dago, berriz ere, arlo ekonomikoa gailentzen ari dela zerbitzuaren kalitatearen gainetik. |
No al aumento de ratios y masificación en las escuelas infantiles del Gobierno de NavarraAdministrazioa 2023/02/27Si el paso de los siete centros al departamento de Educación vino con un aumento de las ratios que podrían haber mermado la calidad del servicio considerablemente, el Gobierno de Navarra va a dar una nueva vuelta de tuerca y para el curso que viene va a imponer las ratios máximas que establece la normativa en vigor: 8-12-16. Queda claro, una vez más, que lo económico prima sobre la calidad del servicio. Fue con la incorporación de la mujer al mundo laboral, hace más de 40 años, cuando surgió la necesidad de crear las escuelas infantiles. Aquel proyecto que en un principio nació para responder a una necesidad asistencial, fue desarrollándose para cumplir también una función educativa. Eso, al tiempo que hizo aumentar la exigencia sobre las educadoras, puso también en valor la labor y profesionalidad de éstas. Su función dejó de limitarse a cubrir las necesidades fisiológicas de la primera infancia, para abarcar también, de cara a garantizar el buen desarrollo personal de los y las niñas, el acompañamiento, apoyo e impulso de su crecimiento físico, psicológico y social. Actualmente el Gobierno de Navarra es el titular de siete escuelas infantiles. Estas son Egunsenti en Burlada, Niño Jesús en Corella y 5 más en Pamplona: Los Ángeles (en el Casco Viejo), Ninia Etxea (en el Ensache), San Jorge (en el barrio del mismo nombre), Santa Teresa (en la Chantrea) y Roncesvalles (en Echavacoiz). En agosto de 2022 las siete pasaron a formar parte del departamento de Educación. En un principio este traspaso nos llenó de ilusión y esperanza, porque consideramos que por fin el ciclo 0-3 iba a tener la importancia y el carácter educativo que se merece. Pero no fué así. Lo primero que hizo el departamento de Educación (lo puso en marcha para el mismo curso 2022-2023 que comenzaría el mes siguiente al traspaso) fue aumentar las ratios. Unas ratios ya de por sí muy alejadas de las recomendaciones de la Red de Atención a la Infancia de la Comisión Europea, donde establecen los siguientes máximos: 4 niños y niñas de 0 a 12 meses por educadora, 6 de 12 a 24 meses, y 8 de 2 a 3 años. Eso supuso una gran desilusión para las profesionales, y un paso atrás en la calidad, la atención y el cuidado de las criaturas. Pero eso solo fue el principio. Recientemente hemos sabido que para el próximo curso 2023-2024, la oferta de plazas del 0-3 en las Escuelas Infantiles del Gobierno de Navarra va a venir con un nuevo aumento de ratios. Eso significa que cada educadora deberá hacerse cargo (mientras exista un espacio de 1,75m2 por criatura) de hasta 8 niños y niñas de 0 a 12 meses, de 12 que van desde los 12 a los 24 meses, o de 16 menores de entre 2 y 3 años. Esto va a suponer, por lo tanto, que habrá que ajustar y exprimir al máximo el espacio, limitando la libertad de movimiento de los y las infantes. Y por si todo lo anterior fuera poco, la inversión económica con la que contarán para adecuar las escuelas y aulas a las nuevas ratios será casi insignificante. Las profesionales del sector nos sentimos TRISTES, DESILUSIONADAS E IGNORADAS. Y, ¿por qué no decirlo? ¡También MUY MUY ENFADADAS! Una vez más, y ya son muchas, se pasan por alto los derechos y necesidades de los y las menores, la confianza de las familias y el criterio de las profesionales. Lo económico prima por encima de la calidad y bienestar que deben ofrecer nuestras escuelas. Una calidad y bienestar que hasta ahora hemos conservado gracias a la implicación y buen hacer de todas las profesionales. Habrá que ver, con las condiciones que nos imponen, si de aquí en adelante también seremos capaces de mantenerlas. |